miércoles, 4 de agosto de 2010

Hallada una patera sin tripulación y a la deriva frente a las costas de Altea



Como si de un barco fantasma se tratara, al mediodía de ayer un navegante descubrió cerca del Morro Toix, en aguas de Altea, una solitaria patera que navegaba a la deriva, medio hundida y sin tripulantes pero llena de ropa, agua y comida. A escasos metros, lujosos yates fondeaban frente a la cala de "La Barra", junto al puerto deportivo Campomanes, y varias motos de agua correteaban entre las olas que creaban a su paso. La Guardia Civil ha abierto una investigación para esclarecer los hechos y, por el momento, tiene abiertas todas las hipótesis, aunque la que parece cobrar más fuerza es que pudiera tratarse de una embarcación que transportaba hasta la costa inmigrantes y no se descarta, incluso, que en ella pudieran haber viajado los tres hombres cuyos cadáveres han sido hallados en los últimos días en aguas de Xàbia y Calp.
Eran las 13.30 horas de la tarde cuando desde un velero que surcaba las cristalinas aguas jugando con el viento de Levante se dio aviso a Salvamento Marítimo sobre el incidente. Acto seguido, la embarcación de este organismo que tiene la Cruz Roja con base en el puerto de Altea ponía rumbo al rescate del pequeño barco de 4 metros de eslora con la esperanza de encontrar a los náufragos. Los tripulantes de la Cruz Roja dieron una pequeña batida por la zona en su travesía desde el puerto al Morro Toix y por las cercanías de este enorme acantilado. al no encontrar cuerpo alguno en la superficie del mar, decidieron recoger la patera y remolcarla hasta el puerto de Altea.
Allí les esperaba una dotación de la Guardia Civil y el concejal de Playas, Santiago Ronda. La arribada a puerto a las 15 horas levantó la expectación de algunos transeúntes y vecinos que se acercaron a observar la patera, que estaba dotada con un motor fueraborda de 30 HP y tenía escrito en su popa el nombre de "Jesús" en árabe. En su interior, medio inundado, flotaban cinco bidones de plástico vacíos con una capacidad para 25 litros de combustible cada uno, y junto a ellos se encontraban seis pares distintos de chanclas de diferentes colores, además de un pequeño bolso-bandolera, y ropa envuelta en plástico.
La Policía Judicial de la Guardia Civil registró posteriormente el interior de la patera. En el bolso-bandolera encontraron una libreta con anotaciones en árabe que se llevaron para analizarla y traducir los textos. De igual modo, de un departamento ubicado en la proa, extrajeron comida y botellas de agua envueltas en bolsas de plástico, además de un anorak, jerséis, pantalones, camisas, zapatillas deportivas y zapatos. Todo el material encontrado se lo llevaron los guardias civiles al cuartel de Altea.
Al parecer, por la ropa encontrada, podrían viajar en esta patera seis personas. Según las fuentes consultadas, se barajan varias hipótesis, desde que podría tratarse de la patera en la que viajaban los tres cadáveres aparecidos en Xàbia y Calpe los días 28 y 29 de julio, a que sea otra embarcación similar que podría haber naufragado en la noche del pasado lunes y que las corrientes marinas la hayan llevado hasta Altea. Los miembros de Salvamento Marino indicaron que el accidente puede haber ocurrido a más de 40 millas de donde aparecieron los cadáveres, dado que por la noche hubo viento del norte y por la mañana éste cambió hacia levante. Esto, unido a que las corrientes del mar se dirigen desde nuestra provincia hacia las Baleares, "puede trasladar a un posible náufrago desde Altea a Xàbia en menos de un día", indicaron.
Por otro lado, desde la Guardia Civil manifestaron que su misión era "analizar la patera y lo que contiene dentro" para después emitir un informe "a nuestros superiores" con el que esclarecer los hechos.
DIEGO COELLO
Información.es